de tanto abrazo loco y sin medida




Si tú

o yo

quisiéramos a alguien

el otro lo sabría.

No estaríamos todo el día juntos
odiando en el silencio,
como follábamos
en el principio
por el suelo,
sin darnos cuenta de lo que no teníamos:
colchón, preservativos,
futuro.

Y ahora que tenemos todo eso
no oímos,
cuando odiamos
en el silencio,
todo
lo que ya
no nos decimos.

2 comentarios:

  1. cierto
    llegó el momento de reinventarse, reinventándoos..... supongo

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  2. Y eso puede ser bueno o malo.

    Pero el poema es bueno, como (casi) siempre. ;-)

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