Salgo
con el carro de la compra a pasear al
perro,
llevo la tarjeta para sacar dinero
a la vuelta iré al barbero y pasaré
por el estanco y la farmacia.
Y así todos los días hasta que cese
la Alarma.
Acaso el preciosismo en la poesía dependa de la joya en la mirada: si es un diamante o un párpado, es decir, si multiplica u opaca. Te...